Las leyes de trece países que integran los Estados miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se usan para encarcelar a personas trans, pues se basan en prejuicios y discriminación contra esta población. Así lo reveló un estudio elaborado por la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex.
“Hasta la fecha, al menos 13 Estados miembros de la ONU en todo el mundo criminalizan explícitamente a las personas trans, pero sabemos que una amplia gama de normas es utilizada para perseguirlas en muchos más países”, señaló Zhan Chiam, coordinador y coautor del informe.
El Informe de Mapeo Legal Trans analizó a 143 países miembros de las Naciones Unidas. Sus conclusiones exponen que hay estados que no quieren que sus ciudadanos coloquen en sus documentos de identidad el sexo con el que se identifican.
Chiam advirtió que “los delitos relacionados con el trabajo sexual o las relaciones sexuales consensuales entre personas del mismo sexo” se usan para perseguir y encarcelar a esta población. Reveló que también se utilizan para el mismo fin “los códigos de moral, buenas costumbres y convivencia, junto con las políticas de espacios públicos”, en Chile, República Dominicana, El Salvador, Honduras, Perú y Venezuela.
Estas leyes son, según el coordinador del informe, “igual de dañinas que las normas que criminalizan de manera explícita las expresiones de género”.
La investigación también hace referencia al reconocimiento de la identidad: hasta el 2019, el Poder Judicial recibió 172 demandas para cambiar el nombre y sexo de personas LGTBIQ+. La Procuraduría Pública del Registro Nacional de Identificación y Estado Civil explicó para el estudio que “solo se puede cambiar el indicador de sexo y el nombre a través de los tribunales”.
El documento alerta que, en el Perú, el Código Civil no brinda orientación a los tribunales sobre el proceso de cambio de indicador de sexo (solo sobre el proceso de cambio de nombre). Asimismo, el debate del proyecto de Ley de Identidad de Género se encuentra pendiente en el Congreso desde 2016.
Chiam hace énfasis en que en todas las regiones del mundo donde se estudiaron los procesos de reconocimiento legal de género, “se han producido regresiones, frecuentemente en línea con los discursos sobre la mal llamada ‘ideología de género’, el surgimiento de movimientos excluyentes y polítiques de derecha que acusan a la comunidad LGBTIQ+ de atentar contra las identidades nacionales”.
Estos ataques tienen consecuencias dañinas en la comunidad LGTBIQ+
, como el aumento y normalización de violencia y crímenes de odio que continúan afectando a las personas de identidades y expresiones de género
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