Por Arturo López Gambito
Desde hace al menos veinte años la saga de Harry Potter
ha inspirado a la generación que actualmente lucha por defender los valores progresistas, y la defensa de las minorías es uno de los temas más importantes. J.K. Rowling
, autora de la historia del joven mago, ha presumido estar del lado correcto de la historia al introducir personajes homosexuales en su saga infantil y al pronunciarse a favor de la comunidad LGBT en más de una ocasión. Sin embargo, detrás de su supuesto progresismo los fanáticos han descubierto una cara oscura, la transfobia de Rowling.
Esta es la segunda vez que la escritora británica se descara ante el mundo y muestra su transfobia, en diciembre del año pasado le llovieron las críticas luego de que publicara un tuit defendiendo a la investigadora feminista Maya Forstater, quien dijo que “los hombres no pueden volverse mujeres”. Las palabras que eligió Rowling para defender a Forstater demostraron su desprecio a la comunidad trans:
" Vístete como quieras, llámate como se te dé la gana, . Duerme con cualquier adulto que te dé su consentimiento. Vive tu mejor vida en paz y seguridad. Pero, ¿forzar a mujeres a perder su trabajo por decir que el sexo es real? #YoApoyoAMaya #EstoNoEsUnSimulacro.
"
Pero su demostración más reciente de transfobia tuvo lugar en otra cuenta de Twitter, ya que dio like a una publicación de un tal Fred Sargeant,
quien se declara como activista gay, y que dice lo siguiente:
"Este es Alex Drummond, un hombre adulto que dice ser lesbiana (sí, él todavía tiene sus partes colgando y ha evitado tomar hormonas) y cree que las verdaderas lesbianas que no disfrutan penes son transfóbicas y deberían ser excluidas de la comunidad lésbica. Ajá, este tipo.
Si alguien cree que este tuit y darle like son síntomas de racionalidad, a continuación les explicamos por qué es algo más complejo y problemático en cuatro puntos, desglosados por el sitio Homosensual : Se refiere a una persona trans con el sexo que no se identifica; dice que no puedes ser trans si no tienes los rasgos físicos que se asocian al sexo con el que te sientes identificada; destaca “verdaderas lesbianas”, negando la identidad de género y la orientación sexual de la mujer mencionada; y expone públicamente a una persona trans.
Ustedes mismos pueden comprobar que el “Like” de Rowling al tuit citado antes es real.
De acuerdo con un estudio realizado por Medican Daily los niños que leen Harry Potter suelen ser más tolerantes con las minorías, y eso debemos reconocérselo a la obra literaria, pero la postura que ha tomado la autora de la misma en torno a las personas trans no es algo digno de aplaudir, y podemos encontrar varias pistas en Harry Potter que revelan un pensamiento mucho más reaccionario del que los fans pretenden.
En la obra se abusa de la ridiculización de los personajes con kilos por encima de la norma social (body shaming), se trata a los humanos no-magos (muggles) de la misma forma condescendiente que el Imperio Británico trataba a los pueblos que conquistó y que consideraba «salvajes». También hay que recordar el maniqueísmo con el que se retrataba a ciertos grupos, por ejemplo los miembros de la casa Slytherin eran retratados como intrínsecamente malvados (con contadas excepciones), y los duendes tenían varios rasgos de los estereotipos judíos más racistas, formas de discriminación que están muy lejos de la tolerancia liberal que promulgan las nuevas generaciones.
Además, Rowling fue criticada por sus personajes femeninos, enaltecidos por los fans de Harry Potter, pero que realmente no son feministas ni modelos a seguir para las jóvenes que leen la obra literaria o se acercan a través del cine a la historia del mago Potter.